viernes, 19 de julio de 2013

Macarons al toque de lavanda



¡Hola a todos!

Hoy os traigo unos macarons buenísimos rellenos con merengue italiano al toque de lavanda.

Aproveche un encargo para un bautizo para hacer unos pocos de más y probar este sabor.

Sigo utilizando la receta de macarons italiana, me gusta más que la francesa y creo que quedan más perfectos.

He cambiado de horno (a uno mejor, claro) y he notado bastante la diferencia, de ahí que si a veces os rompen o cualquier otro desastre que os pueda pasar, la culpa quizás es del horno, tenerlo en cuenta y no cambieis la receta sino el tiempo y forma de cocción.

Con esta receta salen perfectos, os lo aseguro.

Ingredientes (para 160 tapas o 80 macarons):

- 200 gramos de azúcar glas.
- 200 gramos de harina de almendra o almendra molida en su defecto.
- 75 gramos de claras a temperatura ambiente

- 1 pizca de sal

y además necesitaremos:

- 200 gramos de azúcar blanco.
- 54 gramos de agua.
- 75 gramos de claras a temperatura ambiente (3 claras)

Lo primero que haremos es preparar la pasta de almendra, para ello tamizamos el azúcar glas junto con la almendra (a esta mezcla se le llama tanto por tanto) unas cuatro o cinco veces, cuantas más veces lo hagamos más lisa quedará la superficie del macaron.

Lo ponemos en un bol junto con los 75 gramos de claras y batimos (los que tengáis KA o termomix con la pala/mariposa) durante 30 segundos a velocidad media.

Reservamos la pasta de almendras.

Para hacer el merengue italiano* necesitaremos un termómetro de cocina, ponemos en un cazo al fuego el azúcar blanco con el agua, pintamos los bordes con agua y encendemos el termómetro, a su vez batimos en un bol los 75 gramos de claras restantes.

Cuando el cazo alcance los 105-110Cº subimos la velocidad de las claras para que monten y cuando el almíbar llegue a los 120ºC retiramos del fuego y se lo añadimos a las claras (bajamos la velocidad a media) con un chorro lento y constante.

Cuando terminemos de añadir el almíbar volvemos a subir la velocidad y dejamos batir durante unos 10 minutos aproximadamente, hasta que el merengue haya enfriado esté brillante y forme picos.






Lo que vamos a hacer ahora es el famoso macaronage, para ello añadimos un poco del merengue a la pasta de almendra y mezclamos con movimientos envolventes de abajo hacia arriba para soltarla un poco, después terminamos de incorporarlo todo y seguimos mezclando.

Rellenar una manga pastelera con una boquilla de 7 mm de diámetro.

Si queréis que todos los macarons os queden del mismo tamaño, en un papel de horno hacer una plantilla formando círculos de 3,5 cm de diámetro, encima ponemos otro papel de horno (así no se nos estropeara la plantilla y la podremos utilizar más veces) para que transparenten los círculos y con la boquilla en perpendicular y casi tocando el papel, rellenamos hasta completar el circulo.

Le damos unos golpes a la bandeja y dejamos reposar una hora, este tiempo de reposo es muy importante, de aquí dependerá que después en el horno se forme o no el famoso "pie" del macaron, este proceso se llama croûtage.

Cuando toquemos la superficie del macaron y no se nos pegue es que está listo para hornear.

Precalentamos el horno a 130ºC con calor arriba y abajo y sin ventilador.


Metemos en el horno, los dejamos 10-15 minutos (depende lo que caliente vuestro horno), los sacamos y dejamos enfriar por completo.


Para el relleno hacemos un merengue italiano* (igual que el que hicimos para los macarons) y le añadimos unas gotas de esencia natural de lavanda.

Rellenarlos.. y ¡listos!


¡¡Espero que os gusten!!

viernes, 5 de julio de 2013

Hoy mi blog cumple ¡¡tres añitos!! & Tiramisú para tarta fondant

¡Hola a todos!


Hoy mi blog cumple tres años y quiero compartir con vosotros esa alegría (y de paso una receta muuuy rica para vuestras tartas fondant) y es que el blog me ha cambiado totalmente la vida.

Lo que en un principio era un simple recetario donde contaros mis experiencias más básicas del mundo repostero ha ido evolucionando poco a poco para al final, convertirse en mi trabajo, ¡¡trabajar en lo que te gusta!! Un sueño hecho realidad.

Y es que soy de la opinión ( una teoría que últimamente he difundido en miles de conversaciones) de que si trabajas en algo que te gusta, te apasiona, te ilusiona cada día más, vas a hacerlo infinitamente mejor que alguien al que no le importe demasiado y su único fin sea cumplir un horario para percibir un dinero a cambio, sin embargo, al trabajar en algo que realmente te motiva echaras horas extra investigando cosas nuevas, materiales, trucos, experimentando para ir más allá que los demás... buscando la perfección.

Y es lo que me ocurre, el ansia viva de querer hacer siempre cosas, de tener un día de “descanso” y utilizarlo para realizar una nueva receta, probar sabores nuevos, mejorar recetas aunque ya sean buenas, atosigar a familia y amigos para que prueben los inventos (pobrecitos míos) y estar continuamente ideando cosas nuevas.



Al poco tiempo de crear el blog, en el año 2010 comenzaron los primeros encargos, en Asturias aún no había llegado la repostería creativa, los cupcakes, macarons, galletas decoradas y tartas fondant eran unos desconocidos y aposté por ello, ahora me doy cuenta que no me equivocaba, quiero dar las gracias a todos los que confiasteis en mi trabajo y endulzasteis un momento especial con alguna de mis creaciones.

Poco después me plantee impartir talleres de cupcakes, una idea que algunos veían como una autentica locura pero que sin duda, funcionó y continué impartiéndolos, desarrollándolos para perfeccionarlos, trabajando mucho en ellos para que todo fuera perfecto y ampliándolos para acabar impartiendo también talleres de tartas, galletas y macarons.

En ellos conocí a muchísimas personas increíbles, no quiero dejar fuera a nadie pero me veo obligada a citar a algunas de esas personas y es que para mí fueron muy importantes: Rosa, Marta , Zori y Antonio, Isabel, Jennifer, Mónica y Clarita, Ana y Josu, Ana Cris y Elena, Beatriz, Diana, Noemí, Leticia, Inma, María, Rosangela, Sara, Erika... gracias porque ya no sois alumnos y alumnas sois amigos y una gran parte de Ma petite pâtisserie.

Ahora comienzo una nueva etapa de Ma petite pâtisserie, muchos de vosotros ya lo sabéis, otros me preguntáis vía email, facebook.. (gracias a esos casi 6.000 seguidores en facebook!!)

Os lo confirmo públicamente, la tienda de repostería creativa Ma petite pâtisserie abrirá sus puertas en el mes de septiembre de este año 2013, estará situada en Oviedo, en La Florida y ya os puedo anunciar que no será la “típica” tienda de repostería creativa, es más, no habrá nada rosa y todo lo que encontraréis dentro será único, nada de muebles de Ikea -no tengo nada en contra pero creo que una tienda gana mucha personalidad con los muebles-, será un lugar para disfrutar con todos los sentidos.

El proyecto de apertura de tienda lleva ya más de un año en mi vida, me lo planteé por primera vez el año pasado cuando vivía en Roma pero no fue hasta mi regreso, en septiembre de 2012 cuando empecé a mover los primeros papeles.

Después de meses de idas y venidas al ayuntamiento, a la consejería de medio ambiente, a sanidad, a veterinarios, al registro, a la Cámara de Comercio de Oviedo (donde -tengo que decirlo porque parece que solo hablamos cuando nos atienden mal- atienden de maravilla, gracias Begoña!) de quedar con el aparejador y con el contratista, de hablar con fontaneros, electricistas, de visitar cientos de tiendas de azulejos, sanitarios, cocinas, decoración, de escoger donde van los enchufes, como serán los zócalos, la fachada... y millones de detalles más!

Por fín la tienda está casi terminada y desde ya puedo decir que mereció la pena luchar por ello, espero y deseo con todas mis ganas poder seguir diciéndolo dentro de unos años y que sigáis ahí, detrás de esta pantalla de ordenador para leerlo, o mejor aún, en la tienda compartiendo conmigo ¡buenos momentos!



Quiero agradecer la ayuda incondicional que me han proporcionado mis padres durante toda esta trayectoria, los halagos cada vez que terminaba una tarta, las recomendaciones -que aunque a veces me cueste aceptarlas- me han ayudado muchísimo y es que sin ellos Ma petite pâtisserie no se habría convertido en una realidad.

También a una persona muy especial, que siempre ha estado ahí, acompañándome por toda Asturias, de una punta a otra repartiendo encargos, apoyándome y animándome en los momentos de duda, aguantándome en cada tienda o escaparate en la que veo algo relacionado con cupcakes, macarons... y por ser el catador oficial de Ma petite pâtisserie, gracias Guille.

A toda la familia y amigos que habéis estado ahí, haciéndome la pregunta de rigor siempre “¿cómo va la obra?” y aguantando mis contestaciones sobre puertas lacadas en blanco, fachadas con columnas, techos altos, lamparas... Gracias, de verdad.



Y después de esta “turra” soberana que os acabo de dar (ya que nunca cuento nada de mi vida en el blog.. pues ale!) os dejo con una receta que podéis utilizar para vuestras tartas fondant, una auténtica delicia.



Ingredientes (para el bizcocho):


- 8 huevos
- 400 gr mantequilla
- 400 gr azucar
- 600 gr harina
- 3/4 sobre levadura
- 1 pizca de sal
- Vainilla en pasta

Preparamos dos moldes para bizcocho untados con mantequilla y precalentamos el horno a 170ºC.

Tamizamos la harina con la levadura.

Batimos la mantequilla junto con el azúcar unos siete minutos a velocidad media, hasta que doble su volumen

Incorporamos los huevos uno a uno y por último añadimos la harina con la levadura y la vainilla en pasta, mezclamos bien y llenamos los moldes que teníamos preparados.

Horneamos durante 30-40 minutos o hasta que pinchemos con una brocheta y salga limpia.



Ingredientes (para el almíbar):

- 100 gramos de azúcar
- 100 ml de agua
- Vino marsala
- Café

Preparamos un almíbar suave y le agregamos café y vino Marsala al gusto, con ello empapamos los bizcochos.


Ingredientes (para la crema de queso mascarpone):

- 300 gramos de azúcar glas
- 50 gramos de mantequilla
- 125 gramos de queso mascarpone frío.

Batimos el azúcar con la mantequilla a velocidad media hasta que se integren, agregamos de una sóla vez el queso mascarpone y batimos unos cinco-siete minutos.

Nos quedará una crema esponjosa y riquísima con la que rellenaremos y cubriremos la tarta, podemos espolvorear por encima cacao en polvo sin azúcar.

Después podéis cubrirla con fondant y decorarla como más os guste.

¡Que paséis un buen día!